El barbero que ‘dibuja’ figuras en el cabello



Aunque está especializado en cortes modernos, Wilkinson Escorcia también tiene entre su público a niños, damas y caballeros mayores.

Después de rebajar a tijera y máquina los bordes inferiores del cabello de Jonathan Eljaiek, dándole esa característica imagen ‘flow’ del hip hop y el reggaetón, Wilkinson Escorcia toma su navaja de barbero e inicia un elaborado diseño en el lado izquierdo del cráneo de su cliente.

La cuchilla, rasante como podadora eléctrica, abre canales geométricos con precisión quirúrgica sobre el corto cabello a una velocidad sorprendente. Pareciera que el barbero ‘pintara’ sobre un particular lienzo. En pocos minutos, es visible la forma de unas braguetas de jeans.

“Este corte se llama ‘la corredera. Es muy popular entre el gremio que escucha reggaetón, hip hop y el dancehall”, explica el joven de 20 años de edad.

Para el ghetto cultural barranquillero que sigue estos ritmos, la imagen es cosa importante. Pantalones anchos, cadenas, blusas con estampados brillantes, zapatos deportivos de marca y por supuesto, un corte de cabello que los identifique. No es de extrañar que ‘Wiki’ Escorcia se haya convertido en un respetable ícono para ellos, en un ambiente en el cual, hacerse respetar es primordial.



Inicio. ‘Wilki’ recuerda que a los 14 años, un amigo le dijo: “viejo Wilki, motílame e invéntate cualquier vaina”. El joven accedió. Le quedó tan bien, cuenta, que en poco tiempo reunió una clientela gracias a la promoción del camarada. Su local ‘Wial Style’ está situado en el barrio El Silencio, en la calle 79 Número 26 C 3—02.

El barbero se mide a realizar cualquier diseño que se le proponga. Narra que ha impreso el escudo del Junior en la parte posterior del cráneo, ‘degradado’ con capas y tonos de colores, cortes punk, gótico, el estilo de Daddy Yankee y demás exponentes del reggaetón, y uno que llama el ‘Coby’.

“El ‘Coby’ es uno de los que me cuesta más trabajo, porque voy desde un degradado hasta la cuchilla cero. Requiere precisión extrema. Se llama así porque es el corte del basquetbolista Coby Bryant”, explica.

Pero ‘Wilky’ no se limita, y con mentalidad de mercado abierta, también hace blowers a las damas, aliseres y cortes ‘serios’ a los caballeros: todo público.

Al incrementársele el número de sus clientes, tuvo que pedir ayuda a un colega, Albeiro Ortiz Correa. Entre los dos llevan las riendas del negocio.

El costo de un corte de cabello normal es de 5 mil pesos, y dependiendo el grado de complejidad—líneas, dibujos, figuras abstractas—puede llegar a costar 15 mil.

¿Qué opina con respecto a personas que realicen una posible vinculación de su oficio con homosexualidad, al constatar la cantidad de peluqueros gays que existen?

“Soy un barbero, y los barberos se caracterizan por ser hombres en sentido estricto de la palabra. Sin demeritar el trabajo de un peluquero, intento reivindicar la idea de que esto puede ser un oficio al que se le puede imprimir un sello de hombría. A lo demás no tengo por qué darle mente”, dice.