El gobierno de Rousseff dará incentivos fiscales, lo que reducirá en hasta 36% el precio de venta al público de las tablets que se ensamblen en Brasil. Apple anunció su intención de establecerse allí, mientras que Acer y Asus aumentarán sus inversiones

El ministro de Comunicaciones, Paulo Bernardo Silva, explicó que el gobierno va a reglamentar la producción de esos dispositivos esta semana mediante la publicación de un decreto, recogió la estatal Agencia Brasil.

La nueva legislación equiparará las tablets electrónicas con las computadoras, por lo que se beneficiarán de los descuentos fiscales actualmente aplicados a esos dispositivos, abaratando su precio final e incentivando a las fabricantes a producir en Brasil.

El mes pasado, durante la visita a China de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, el gigante tecnológico taiwanés Foxconn anunció que va a fabricar el popular iPad de Apple en Brasil.

Foxconn invertirá u$s12.000 millones en los próximos cinco años en la construcción de una nueva planta en territorio brasileño, en la que fabricará la mayoría de los componentes utilizados en los dispositivos portátiles de Apple.

Anticipándose a la instalación de la nueva fábrica, la compañía taiwanesa comenzará en julio próximo el montaje del iPad en una de las tres plantas que posee en Brasil, a partir de componentes fabricados en China, según fuentes oficiales brasileñas.

Siguiendo los pasos de Foxconn, las empresas informáticas taiwanesas Acer y Asutek anunciaron la semana pasada su intención de aumentar sus inversiones en Brasil.

Acer decidió inyectar unos u$s55 millones en su filial brasileña y la fabricante de la marca Asus anunció que pretende establecer una ciudad industrial.