La mayor fabricante de armas de Japón, bajo ataque cibernético Mitsubishi Heavy Industries reconoció que piratas informáticos accedieron a sus computadoras. La meta habrían sido las fábricas de componentes de para submarinos, misiles y centrales de energía nuclear. Hubo un segundo ataque confirmado a otra empresa del sector
Mitsubishi Heavy Industries dijo en un comunicado que podría haberse robado cierta información en el primer ataque conocido contra la industria japonesa de defensa.
"Hemos averiguado que se ha filtrado alguna información de sistemas, como direcciones IP, y eso ya es bastante espeluznante", dijo un portavoz de Mitsubishi Heavy.
"No podemos descartar pequeñas posibilidades de más filtraciones de información, pero hasta ahora, datos cruciales de nuestros productos o tecnologías se han mantenido a salvo", indicó, y añadió que la compañía se dio cuenta por primera vez del ciberataque el 11 de agosto.
Un documento oficial sobre defensa dado a conocer el mes pasado pedía aumentar la vigilancia contra los ciberataques después de que se produjeran otros de alto nivel este año, por ejemplo contra Lockheed Martin y otras grandes compañías norteamericanas del sector.
Se ha sugerido que estos ataques podrían haber salido de China.
El diario Yomiuri dijo que se encontraron alrededor de 80 computadoras infectadas con virus en la sede tokiota de la compañía, así como en otras sedes de fabricación, investigación y desarrollo, como Kobe Shipyard & Machinery Works, Nagasaki Shipyard & Machinery Works y Nagoya Guidance & Propulsion System Works.
Kobe Shipyard construye submarinos y fabrica componentes para construir centrales nucleares, mientras que Nagasaki Shipyard construye buques escolta.
La central de Nagoya hace misiles dirigidos y proyectiles, agregó el diario citando fuentes sin identificar.
En la sede principal de Mitsubishi Heavy y otras plantas se encontraron al menos ocho tipos diferentes de virus informáticos, incluyendo troyanos, que roban información clave del hardware infectado, según Yomiuri.
Mitsubishi Heavy es el principal contratista de defensa del país, con 215 contratos valorados en 260.000 millones de yenes (unos 3.400 millones de dólares) del Ministerio japonés de Defensa en el año hasta marzo pasado, es decir, casi una cuarta parte del gasto del Ministerio en ese periodo. También ha trabajado con Boeing, fabricando alas para el 787 Dreamliner.
"Los japoneses hacen grandes submarinos convencionales que están entre los más sofisticados del mundo (...) han integrado muy bien soluciones con sus propios sistemas mecánicos, electrónicos y de control, así que es una propuesta de hacking muy atractiva", afirmó Andrew Davies, analista de ciberguerras del centro de estudios con apoyo gubernamental Australian Strategic Policy Institute.
Otro ataque
Servidores y computadoras de la japonesa IHI fueron víctimas de un ciberataque y la compañía está en contacto con la policía por el hecho, informó el diario económico Nikkei en su página web.
Un responsable de IHI dijo que no podía realizar comentarios al respecto por el momento. IHI suministra piezas de motores para aviones de combate para el Ministerio de Defensa así como vasijas de contención y vasijas presurizadas para reactores nucleares.