El movimiento humano, futuro cargador de los dispositivos móviles La recolección de energía mientras se da un paseo podría ser suficiente para alimentar desde notebooks hasta smartphones. La nueva tecnología -en etapa de desarrollo- reduciría el uso de baterías
Tom Krupenkin y J. Ashley Taylor, ambos investigadores de Ingeniería de la Universidad de Wisconsin-Madison, señalan que su estudio apunta a reducir la dependencia al uso de baterías y, en su lugar, capturar la energía del movimiento humano.
"Los seres humanos son poderosas máquinas productoras de energía", explica Krupenkin en un artículo publicado en la revista Nature Communications que recoge Europa Press.
En su investigación, los ingenieros describen un proceso de recolección de energía mediante una tecnología conocida como "electrohumectación inversa", que convierte la energía mecánica en energía eléctrica.
Esta tecnología podría permitir la creación de un tipo de calzado capaz de capturar la energía producida por los humanos al caminar, que normalmente se pierde, y convertirla en vatios de potencia eléctrica que puedan ser utilizados para alimentar dispositivos electrónicos móviles.
A diferencia de una batería tradicional, este recolector no necesita ser recargado, ya que se genera constantemente durante el proceso normal de caminar.
Las actuales tecnologías de aprovechamiento de la energía están dirigidas a aplicaciones de alta potencia, tales como la energía eólica o solar, o de muy baja potencia, tales como calculadoras, relojes o sensores. "Lo que aún no se ha tocado es la potencia en el rango de vatios, el rango de potencia necesario para la electrónica portátil", explican.
La energía solar, según explican los investigadores, también puede ser utilizada para alimentar dispositivos electrónicos portátiles pero, a diferencia del movimiento humano, la luz solar directa no suele ser una fuente de continua disponibilidad energética para los usuarios de la electrónica móvil.
Por otra parte, el colector de energía también puede ser integrado en un punto de acceso Wi-Fi, que actuaría como intermediario entre los dispositivos móviles y una red inalámbrica. Esto permitiría a los usuarios utilizar a la perfección la energía generada sin necesidad de conectarse físicamente a sus dispositivos móviles del calzado.
El desarrollo inicial de esta tecnología fue financiado por una beca de la National Science Foundation estadounidense. Ahora los científicos están tratando de comercializar la tecnología a través de una empresa que establecieron, llamada InStep NanoPower.